EL NUEVO DESARROLLO PARA NUESTROS HIJOS

Por: Ilse López Flores 

Licenciada en Ciencias de La comunicación Social 

El sistema de crianza de nuestros hijos es promotor del desarrollo. Tal como lo explican Ángel Blas y María Rojas en su libro sobre las nuevas propuestas de desarrollo. En nuestra vida diaria nos encontramos con realidades crueles de la gente, condiciones inhumanas en la que viven muchos niños de nuestra Piura, una ciudad que está en proceso de desarrollo. 

Mientras el capital se mueve cada día es mayor el número de pobres. Los pobres de nuestra región no saborean el chorreo de la teoría económica en la que existen clases sociales y explotación hacia muchos trabajadores, con grandes establecimientos comerciales extranjeros que remuneran de manera miserable a sus trabajadores frente a sus ventas millonarias. 

El desarrollo de nuestra región implica construir una sociedad donde toda persona pueda vivir una vida plenamente humana; no se trata de vencer el hambre, ni siquiera de hacer retroceder la pobreza, pues ello es insuficiente. La familia constituye el rol más importante dentro del proceso de desarrollo, pues el desarrollo no se reduce al simple desarrollo económico, sino más bien ha de ser integral, es decir promover a todas las personas y a toda la persona. 

Las formas de desarrollo que actualmente se vienen aplicando para desarrollar nuestro país y nuestra región no están funcionando. Piura, como ciudad, alcanza un 91% de analfabetismo, 83% de escolaridad y 69 años de esperanza de vida, pero provincias como Ayabaca y Huancabamba registran un IDH bajo. La teoría económica es muy inhumana, le sigue la del capital humano donde se incluye educación y capacitación pero no es suficiente. 

Otra teoría analizada por Blas y Rojas se basa en el desarrollo humano sostenible donde sólo el ser humano puede ser sujeto de desarrollo en buena relación con la naturaleza pero el ser humano no puede quedar fuera de ella. 

Justamente la nueva teoría plantea que la base del desarrollo radica en la familia. Contar con un proyecto de familia y de vida es muy importante. Sería mejor planificar bien el número de hijos y tener un proyecto de vida para ellos que tener muchos niños en la avenida Sánchez Cerro limpiando carros y pidiendo limosnas. 

Los piuranos necesitamos un sistema de crianza con nuevos nutrientes que promuevan desarrollo y una sociedad equilibrada. A ello se une el buen ejercicio de la autoridad donde los padres estemos al servicio de nuestros hijos para comunicarnos mejor, orientar y guiar por un buen proyecto de vida. Una autoridad sana brindará seguridad y confianza en sí mismos, nuestros hijos se sentirán queridos e importantes. Es la mejor forma para lograr el desarrollo.